6 dic 2009

Pequeña muerte


Estoy por irme. Y no quiero. Por cuanta vez me está pasando y cuantas veces más volverá a pasar? No debería mejor acostumbrarme, aceptar lo que yo misma he escogido? Pero es que es imposible acostumbrarse, odio las despedidas, no soporto las rupturas, no quiero que el tiempo se me acabe y no me gusta pensar que las cosas seguirán sin que yo formara parte de ellas. Como una pequeña muerte. Una vez aquí y otra vez allá...

Ir y volver, es lo que hago. No me hace bien, y no hace bien a la gente que me quiere. Pero, qué es lo que debería hacer? Dejar de ir? Ir y no volver? Quedarme? En donde? Hay tantas preguntas y tan pocas respuestas. Tengo miedo de decidirme. Tengo miedo de equivocarme. Tengo miedo de lastimar a mis proximos y tengo miedo de engañarme a mí. Tengo miedo de quedarme sola donde sea.

Es curioso ver como las cosas que creíamos manejar de repente nos alcanzan y se vuelven un obstáculo que nos impide seguir. Me doy cuenta que no soy tan libre ni independiente como pretendía. Que no soy fuerte, ni tan estable. Que soy insegura. Que no sé.

7 comentarios:

MariCarmen Vargas Negrete dijo...

Tengo una amiga que lleva muchísimos años viviendo en Lima. Es una persona ya mayor y muy sabia. Dice q cuando está aquí disfruta de las cosas q en su país no tiene y cuando está en su país (de vacaciones) disfruta de aquellas q acá no encuentra. Nota q usa la palabra "disfruta," es decir, piensa en lo positivo y no en lo malo.

Aquellas cosas q te gusten/quieras hacer siempre vas a tener la posibilidad de hacerlas. Y siempre, siempre vas a tener la posibilidad de volver/irte y quienes te quieren realmente te apoyarán en lo q decidas. No creo tampoco q te quedes sola, aunq no te conozco personalmente me das la impresión de ser alguien q piensa mucho en los demás y q gente así nunca lo está. Ánimo q siempre se puede :)

Anónimo dijo...

Espero que cuando regreses puedas ir a visitar mi colegio para que conozcas a l@s niñ@s y adolescentes.
Lo que decidas, seguro que será para tu bien. Eres una joven de buen corazón.
Te esperaremos con cariño.
AnaTeresa

Yanapumas Perú dijo...

Dora de la vida...estemos tristes un momento...un tiempito...hace bien. No es malo estar triste o inseguro o nostálgico...todo eso es bueno. Dejalo que se manifieste y sigue escribiendo.
La dualidad es importante y mantiene el equilibrio de todo , de todos...
blanco-negro; hombre-mujer; acá-allá; tristeza...
abrazo fuerte. más fuerte.

Dora dijo...

Y sí, sin lo malo no hay lo bueno y sin la tristeza no hay alegría. Pero hay momentos en los que parece estar ganando uno de los elementos y se pierde el equilibrio. Y de hecho, es una señal para tratar de recuperarlo, y es lo que me toca... para poder otra vez disfrutar de las cosas buenas que trae la vida.
Gracias por todas las palabras tan bonitas!

Mamá de 2 dijo...

Hola, Dora.

Me gustó mucho tu país, pero noté cierta tristeza. Tal vez el frío, tal vez el hecho de que fue mi primera vez en una zona "eslava" y las diferencias se hacen más notorias (a los alemanes ya los tengo asumidos, sencillamente paso de ellos, jejejeje).

En todo caso, quería comentarte que, en menos de dos meses, yo también he de morir un poquito. Regresaré a Perú y aunque nunca llegué a sentir Bilbao como "mío" y lo que me gusta de Europa está extendido por todo el continente, no pude evitar crear vínculos y amar...

De todas maneras, sé que volver a Perú va a ser el primer paso de una etapa diferente, una en la que intentaré echar raíces fuertes y descansar un poco el ímpetu aventurero, que ya no es edad.

Y bueno, dicen que "el amor verdadero" (amigos, etc.) no se acaba con la distancia...

Un abrazo!

Dora dijo...

Ay, Angela, acabo de llegar a Praga y me parece el lugar mas triste del mundo. De hecho en verano no se nota tanto, pero no solo es el clima... los checos somos bien pesados, serios, negativos, quejumbrosos. Claro que tambien tenemos el lado bueno (solo que ahora no me acuerdo cual sería)y nuestro país tendrá otros encantos que el clima.

A ver como será para tí regresar a Perú, como lo encontrarás después de tu experiencia europea, después de conocer lo otro y sentir tanta nostalgia por lo tuyo. De hecho que tampoco será fácil. Pero lo importante es que quieras volver.

La amistad supera la distancia, y el amor... ya verás. De todas maneras te deseo mucha suerte!
Un abrazo.

Mamá de 2 dijo...

Como diría mi amiga alemana: "Ya estamos adultos y ya podemos tomar decisiones, él puede venir a Perrú, tú puedes ir para la Espania si consigues un trabajo y con calma..."

He aprendido cosas estos últimos años y una de las más importantes ha sido que para mí no es sano "seguir" a un novio (lo he intentado alguna vez, me hace daño, no me lo enseñaron en casa). Por supuesto, el proceso de aprendizaje me ha costado muchísimo.

Va a ser importante que él pueda ir a Perú (irá en unos pocos meses) y que sea capaz de reconocerme en mi entorno. Si vemos que nos es totalmente necesario estar juntos, ya lo arreglaremos. Si no, de todos modos ha sido mi relación más positiva, respetuosa y tranquila, así que, estoy segura, sobrevivirá la amistad.

Joder, se me están pegando la "frialdad" y "practicidad" nor-europea, jejejejejejeje...

No sería ésta la primera vez que regreso a Perú desde Europa, así que puedo imaginar el reencuentro. Lo bueno es que he conseguido romper muchas máscaras, aquí y allá, así que espero estar pisando firme esta vez.